Un hecho de crueldad animal ha conmocionado a la comunidad de la vereda Sierra Chiquita, en la zona rural de Montería, luego de que tres perros pertenecientes a una misma familia fueran envenenados. El último de los animales murió en la madrugada del domingo dentro de su propia vivienda, aumentando la indignación de los habitantes del sector, que denuncian la creciente frecuencia de estos actos violentos contra animales.
Vecinos del lugar han señalado que este tipo de ataques contra mascotas se han vuelto recurrentes, pese a no existir motivos claros para tales actos. Las familias afectadas han expresado su dolor e impotencia, recordando que los animales no solo son compañeros, sino también miembros del hogar. La comunidad exige que estos casos no queden impunes y que se fortalezca la conciencia sobre el respeto por la vida animal.
Desde el hogar de paso Dulces Mininos, dedicado a la protección y bienestar de animales, se rechazó enérgicamente lo ocurrido. La organización ha anunciado su apoyo a los propietarios de los perros para que se adelanten las denuncias correspondientes y se busque justicia. Además, pidieron la aplicación estricta de la Ley 1774 de 2016, conocida como la Ley Ángel, que tipifica el maltrato animal como delito y establece sanciones penales para los responsables.
