Bogotá. Un mensaje en X a las 3:41 de la madrugada, fue el detonante para que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, rompiera relaciones con su homólogo de Colombia, Gustavo Petro, quien a esa hora escribió: «Los EEUU no pueden tratar como delincuentes a los migrantes colombianos. Desautorizo la entrada de aviones norteamericanos con migrantes colombianos a nuestro territorio. EEUU debe establecer un protocolo de tratamiento digno a los migrantes antes que los recibamos nosotros».
Un par de horas después, el gobierno norteamericano dio el primer campanazo de lo que serían las repercusiones por esa decisión, al anunciar el cierre de la oficina de visas en su embajada en Bogotá, afectando a miles de colombianos. Sin embargo, lo peor estaba por venir y Trump anunció que eliminaba la visa americana a todos los funcionarios del gobierno colombiano y sus familias, pero lo más grave, el negativo impacto a la economía del país imponiendo aranceles a sus exportaciones.
Petro de esta manera se convierte junto a Ernesto Samper en los presidentes colombianos a los que les suspenden la visa estadounidense, en un mensaje por el mal manejo de la política internacional del actual gobierno, aliado de dictaduras como de Venezuela y Cuba, pero alejado del principal socio comercial. Como si fuera poco, Inglaterra les exige visa a los colombianos y con Israel se rompieron las relaciones.
Donald Trump al ser enterado de la negativa de Gustavo Petro de recibir los aviones con cerca de 160 colombianos, lanzó la dura advertencia y de inmediato las reacciones no se hicieron esperar, ya que esta se convierte en la peor crisis diplomática entre ambas naciones y muchos le recordaron a Petro que en 2024, México deportó 40 mil connacionales y guardó silencio.
Rubio desmintió a Petro
El secretario de Estado de los Estados Unidos, Marco Rubio, desmintió a Petro: «El presidente Trump ha dejado en claro que, bajo su administración, Estados Unidos ya no será objeto de mentiras ni de abusos. Es responsabilidad de cada nación recuperar a sus ciudadanos que se encuentran ilegalmente en Estados Unidos de manera seria y expedita. El presidente colombiano, Petro, había autorizado los vuelos y había otorgado todas las autorizaciones necesarias, pero luego canceló su autorización cuando los aviones ya estaban en el aire. Como lo demuestran las acciones de hoy, somos inquebrantables en nuestro compromiso de poner fin a la inmigración ilegal y reforzar la seguridad fronteriza de Estados Unidos».
«Túmbeme, presidente»
Cuando muchos apostaban que el tema se trataría por la vía diplomática, Gustavo Petro a eso de las 4:30 de la tarde en un extenso mensaje retó a Trump, a quien le dijo que su bloqueo no lo asusta y lo conminó a que lo tumbara.
«Trump, a mí no me gusta mucho viajar a los EEUU, es un poco aburridor, pero confieso que hay cosas meritorias, me gusta ir a los barrios negros de Washington, allí vi una lucha entera en la capital de los EEUU entre negros y latinos con barricadas, que me pareció una pendejada, porque deberían unirse», inició su retahíla.
Luego, Petro apuntó: «No me gusta su petróleo, Trump, va a acabar con la especie humana por la codicia. Quizás algún día, junto a un trago de whisky qué acepto, a pesar de mi gastritis, podamos hablar francamente de esto, pero es difícil porque usted me considera una raza inferior y no lo soy, ni ningún colombiano. Así que, si conoce alguien terco, ese soy yo, punto. Puede con su fuerza económica y su soberbia intentar dar un golpe de estado como hicieron con Allende».
Y remató señalando: «Túmbeme presidente y le responderán las Américas y la humanidad. Su bloqueo no me asusta; porque Colombia además de ser el país de la belleza, es el corazón del mundo. Se que ama la belleza como yo, no la irrespete y le brindará su dulzura. Me informan que usted pone a nuestro fruto del trabajo humano 50% de arancel para entrar a EEUU, yo hago lo mismo. Que nuestra gente siembre maíz que se descubrió en Colombia y alimente al mundo».
La respuesta de Donald Trump
«Me acaban de informar que a dos vuelos de repatriación desde los Estados Unidos, con un gran número de delincuentes ilegales, no se les permitió aterrizar en Colombia. Esta orden fue dada por el presidente socialista de Colombia, Gustavo Petro, que ya es muy impopular entre su pueblo. La negación de estos vuelos por parte de Petro ha puesto en peligro la Seguridad Nacional y la Seguridad Pública de los Estados Unidos, por lo que he ordenado a mi Administración que tome inmediatamente las siguientes medidas de represalia urgentes y decisivas:
-Aranceles de emergencia del 25 % sobre todos los bienes que llegan a los Estados Unidos. En una semana, los aranceles del 25 % se elevarán al 50 %.
-Una prohibición de viajar y revocaciones inmediatas de visa para los funcionarios del gobierno colombiano y todos los aliados y partidarios.
-Sanciones de visado para todos los miembros del partido, familiares y partidarios del gobierno colombiano. -Inspecciones mejoradas de aduanas y protección fronteriza de todos los ciudadanos colombianos y carga por motivos de seguridad nacional.
-Sanciones del Tesoro, Bancarias y Financieras de la IEEPA que se impondrán plenamente. Estas medidas son solo el comienzo. No permitiremos que el gobierno colombiano incumpla sus obligaciones legales con respecto a la aceptación y devolución de los criminales que obligaron a los Estados Unidos».
Las consecuencias serán terribles
Las reacciones en Colombia no se hicieron esperar y en su gran mayoría coincidieron en las graves consecuencias comerciales que traerían las medidas del gobierno de los Estados Unidos.
La primera en reaccionar fue la presidenta de la Cámara de Comercio Colombo Americana, María Claudia Lacouture, quien habló de la gravedad del asunto. «Si EE.UU. impone aranceles de emergencia del 25% (y luego del 50%) a los productos colombianos, el impacto será inmediato y devastador. El proceso es rápido, no requiere aprobación del Congreso y afectará gravemente nuestra economía. Solo en café, más de 500 mil familias dependen de este sector. En flores, miles de madres cabeza de familia perderían su sustento. Y así podemos seguir sumando sectores que se verán golpeados. Es urgente una acción diplomática serena y responsable».
El expresidente Iván Duque cuestionó la posición de Gustavo Petro: «En un acto de tremenda irresponsabilidad, el Gobierno Petro ha desafiado una decisión soberana de los EE.UU. sin siquiera adelantar un proceso de diálogo diplomático, desconociendo las relaciones bilaterales que por más de 200 años han tenido los dos países. Estás bravuconadas populistas del gobierno Petro frente a una decisión de seguridad nacional de los EE.UU., están desatando medidas sancionatorias cuyo costo para el país y sus ciudadanos son enormes. El congresista Andrés Forero también criticó la postura del gobierno Petro: «Con improvisados mensajes de madrugada en X, sabe Dios en qué estado, Gustavo Petro logró que EEUU anunciara aranceles de 50% a los productos colombianos. Esto golpea la reactivación económica y causa desempleo. Petro Logró desviar la atención del Catatumbo perjudicando al país».
El exministro de Hacienda, José Manuel Restrepo, afirmó sobre la respuesta de Petro: «En serio está es su respuesta diplomática? ¿En serio está es la respuesta de nuestro jefe de estado? Por favor Presidente recapacite!!, ¡¡Serénese que está poniendo en riesgo la economía de nuestro país!! Y deje la soberbia y el resentimiento que son malos consejeros. Al resto del gobierno le corresponde rodear al presidente y calmarlo en algo que puede ser muy costoso para el país. La arrogancia y la soberbia son malas señales en las relaciones diplomáticas. ¡¡No jueguen con fuego!!». La exministra de Agricultura del gobierno Gustavo Petro, Cecilia López Montaño también se pronunció: «Este tema con Estados Unidos es tan grave que se necesita citar ya a la Comisión de Relaciones Exteriores. Ante semejante anuncio dudo que toda Latinoamérica apoye a Colombia por miedo a la retaliación. Momento para calma, cabeza fría y cero improvisaciones».
El gobernador de Córdoba, Erasmo Zuleta Bechara, fue otro de los dirigentes que intervino en esta crisis. «Un llamado a la prudencia en el manejo de nuestras relaciones exteriores. Con los aliados, siempre será mejor tender puentes antes de confrontar. Estados Unidos ha sido por años, aliado de nuestro país. Hoy el 30% de nuestras exportaciones van a USA y cualquier decisión que genere traumatismos en nuestra gente, merece ponderación. ¡El bienestar de Colombia está por encima de todo!».
Entre tanto, el senador Marcos Daniel Pineda García habló del impacto al agro colombiano. «¡El campo colombiano en grave riesgo! Las medidas anunciadas por EE. UU. para aumentar aranceles a nuestros productos amenazan miles de empleos y la estabilidad del sector agrícola. Estados Unidos es nuestro principal socio comercial, con exportaciones anuales superiores a 13 mil millones de dólares en productos como café, flores, banano, aguacate Hass, lima Tahití, piña, mango, entre otros. Aranceles del 25 % al 50 % afectarían gravemente su competitividad, golpeando a nuestros agricultores y trabajadores del campo.
Instamos al Gobierno a actuar con mayor racionalidad y a tomar las medidas diplomáticas correspondientes para evitar acciones que pongan en riesgo la economía nacional».
Tomada del Meridiano
