Una tragedia sacudió el barrio Aranjuez, al norte de Medellín, cuando Lina Marcela Ospina, de 40 años, perdió la vida al someterse a una liposucción en su propia casa.
El procedimiento fue realizado por una amiga suya, enfermera de profesión, quien carecía de las condiciones y permisos necesarios para llevar a cabo una intervención quirúrgica de esta magnitud. La intervención, realizada en un entorno completamente inapropiado, resultó fatal para la mujer, madre de tres hijos.
Una liposucción ilegal
Según las autoridades, el procedimiento se desarrollaba con normalidad hasta que Lina Marcela presentó complicaciones graves tras la administración de anestesia. Aunque fue trasladada de urgencia a la Clínica León XIII, llegó sin signos vitales y fue declarada muerta a las 10:50 p.m. Este hecho pone nuevamente en evidencia el riesgo de las cirugías estéticas realizadas en lugares no autorizados y sin supervisión médica adecuada.
En lo que va del año, 13 mujeres han perdido la vida en Colombia debido a procedimientos estéticos ilegales. Estas intervenciones, realizadas en condiciones precarias, han encendido las alarmas de las autoridades sanitarias, quienes intensificaron operativos para combatir esta problemática. En Medellín, la Secretaría de Salud ha clausurado 41 establecimientos que operaban sin los permisos necesarios.
Este caso subraya la importancia de acudir a clínicas certificadas y profesionales capacitados para cualquier procedimiento médico. Las autoridades hacen un llamado urgente a la ciudadanía para evitar prácticas clandestinas que ponen en riesgo la vida y reiteran que continuarán tomando
