Las madres comunitarias en Montería y en todo el país se movilizarán este 21 de noviembre para exigir respuestas del Gobierno Nacional y del ICBF ante el reciente recorte inesperado en sus contratos
La protesta fue convocada tras la decisión de suspender el servicio, a pesar de que los contratos estaban firmados para finalizar en diciembre, lo que afecta su estabilidad laboral y la continuidad del servicio educativo y de cuidado para cientos de menores.
El sindicato de madres comunitarias denuncia que esta situación pone en riesgo la atención en la primera infancia y exige que el Gobierno revise las irregularidades en la contratación, garantizando los derechos laborales y la protección social de las mujeres que dedican su vida al cuidado de los niños y niñas en condiciones vulnerables. La propuesta del Gobierno es formalizar a más de 40,000 madres en la planta del ICBF, pero las mujeres insisten en que aún persisten necesidades de mayor estabilidad y garantías laborales.
Las protestas y solicitudes de respuestas buscan presionar la acción gubernamental para resolver esta problemática y asegurar la continuidad del servicio con condiciones dignas.
